Desarrollo de la visión en el nacimiento
Apenas nacido, el médico examinará brevemente los ojos de su bebé para descartar señales de cataratas congénitas u otros problemas oculares graves del neonato. Si bien estos problemas oculares son poco comunes, deben ser detectados tempranamente para reducir sus efectos en el desarrollo de la visión del bebé. Asimismo, generalmente se aplica un ungüento antibiótico en los ojos del bebé recién nacido para ayudar a evitar una infección ocular proveniente de bacterias presentes en el canal de parto.
Al nacer, su bebé puede ver únicamente en blanco y negro, y tonos de gris. Las células nerviosas de su retina y su cerebro que controlan la visión no están completamente desarrolladas. Por otra parte, los ojos de un bebé recién nacido carecen de la capacidad de adaptarse (enfocar objetos cercanos). Por ello, no se preocupe si su bebé no parece estar enfocando los objetos o su rostro, esto conlleva tiempo. A pesar de estas limitaciones visuales, los estudios muestran que en el transcurso de unos días después del nacimiento, los bebés prefieren mirar la imagen del rostro de su madre, que la de un extraño.
Los investigadores creen que esta preferencia depende de estímulos grandes y de alto contraste, como el perímetro de la línea del cabello del rostro de la madre. (En los estudios, si estos perímetros se enmascararan con un pañuelo o gorra de baño, la preferencia del bebé de mirar al rostro de su madre desaparecería.) Entonces, para alentar la interacción visual con su bebé, conserve el mismo peinado y evite alterar su apariencia. Algo que quizás note es el tamaño de los ojos de su bebé. Esto se debe a que el desarrollo normal del bebé tiene lugar desde la cabeza hacia abajo. Al nacer, los ojos de su bebé ya son un 65 % del tamaño que tendrán de adulto.
Los ojos de su bebé en el primer mes
Los ojos del bebé no son muy sensibles a la luz durante el primer mes de vida. De hecho, la cantidad de luz necesaria para que un bebé de 1 mes de vida tenga conciencia de la presencia de la luz (lo que se llama umbral de detección de la luz) es 50 veces más alta que la de un adulto.
Mantener constante su apariencia ayuda a su bebé a que la reconozca y que interactúe con usted desde el nacimiento.
Por tanto, está bien dejar encendidos algunos focos de luz en la habitación. No afectará su habilidad para dormir y podría ayudar a evitar que usted tropiece con los muebles cuando entre a verlo.
Los bebés comienzan a desarrollar la capacidad de ver en colores muy rápidamente. A la semana del nacimiento, pueden ver el rojo, naranja, amarillo y verde. Sin embargo, toma un poco más de tiempo para que sean capaces de ver el azul y el violeta. Ello se debe a que la luz azul tiene longitudes de onda más cortas, y existen menos receptores de color en la retina humana para esta.
No se preocupe demasiado si, más adelante, en ocasiones los ojos de su bebé no parecen estar trabajando en equipo. Es posible que un ojo se mueva hacia adentro o afuera y no en la alineación correcta. Es normal. No obstante, si usted observa una gran desalineación constante de los ojos, consulte al profesional de la visión inmediatamente.
Consejos: Para ayudar a estimular la visión de su bebé, decore su habitación con colores brillantes y alegres. Incluya piezas y muebles de colores y formas contrastantes. También, cuelgue un móvil de colores vivos sobre su cuna o cerca de ella. Escoja uno con gran variedad de colores y formas.
